Planificar la llegada de un bebé es, sin dudas, uno de los momentos más felices, tumultuosos y confusos en la vida de una mujer. Esto se debe a que, mientras un torbellino de cambios ocurre en su cuerpo, modificando incluso su estado emocional, también ella debe estar lista para todas las demás cuestiones, como su salud y la salud del bebé. Y con tantas cosas en mente, es muy fácil terminar creyendo en supersticiones o informaciones incorrectas sobre lo que es o no es mejor para el embarazo. Para ayudarte en este aspecto, hoy hablaremos sobre las diferencias entre el ácido fólico y el metilfolato, mostrando qué son, para qué sirven y en qué situaciones pueden ayudar a una mujer embarazada. ¿Quieres saber más? ¡Sigue leyendo hasta el final!

¿Qué es el ácido fólico?

El ácido fólico1, o folato, es un tipo de vitamina extremadamente importante para nuestro organismo. Es responsable de la producción de ciertas proteínas, de los glóbulos rojos, de la reparación en nuestro ADN, del mantenimiento del sistema nervioso y cardiovascular, y, principalmente, de la división y producción celular. Esta es una de las razones por las que el folato es recomendado para las embarazadas, ya que cuando hablamos del crecimiento de un feto, también estamos hablando de producción y crecimiento celular.
Se recomienda que una mujer comience a tomar un suplemento basado en ácido fólico aproximadamente 3 meses antes de quedar embarazada2. Esto prepara su organismo para tener un mayor cuidado en la producción celular y ayuda a asegurar que el feto tenga una buena formación, especialmente en lo que respecta al sistema nervioso y al tubo neural del feto.

Sin embargo, siempre es importante hablar con tu médico antes de tomar cualquier tipo de suplemento. Necesitas asegurarte de que tu cuerpo no reaccione de manera adversa y de que no recibas una sobredosis de la vitamina, lo cual puede ser perjudicial incluso para el bebé. Así que, presta atención también a estos detalles.

Una de las principales ventajas es que el ácido fólico se encuentra naturalmente en varios alimentos, como:

  • Naranja
  • Limón
  • Frijoles
  • Garbanzos
  • Plátano
  • Mango
  • Hígado
  • Berros
  • Col rizada
  • Cereales integrales
  • Aguacate
  • Espinaca
  • Huevo

Es claro que cada alimento tiene diferentes cantidades de ácido fólico y que cada organismo lo absorbe de manera distinta. Sin embargo, en general, el consumo de estos alimentos puede ayudar a la mujer a obtener folato, entre otros beneficios que también poseen.

comida natural

A pesar de no estar directamente relacionados con el embarazo, consideramos importante listar otros beneficios que el ácido fólico puede proporcionar. Esto es porque todos los que mencionaremos aquí también ayudan en la formación del bebé durante el embarazo, aunque de manera indirecta. Estos beneficios son:

  • Aumenta la inmunidad
  • Beneficia el cabello y las uñas
  • Fortalece los huesos
  • Es beneficioso para el corazón
  • Es crucial para el sistema nervioso

Profundizaremos en cada uno de estos beneficios para que puedas entender cómo pueden beneficiar a una embarazada y a su bebé.

Aumenta la inmunidad

Durante el embarazo, el cuerpo experimenta grandes transformaciones que pueden debilitar la inmunidad de la mujer. Esto es perjudicial en muchos sentidos, pero principalmente porque una enfermedad grave también puede afectar al bebé. El ácido fólico, o folato, es esencial para fortalecer la inmunidad de una persona. Por esta razón, su uso es muy beneficioso en este sentido. Claro está que, además de él, varios componentes del complejo B, entre otros, también son esenciales para fortalecer la inmunidad.

Beneficia el cabello y las uñas

La ingesta de ácido fólico también contribuye a mantener la piel, el cabello y las uñas saludables. Esto significa que ayuda a reducir problemas como el acné, la piel seca, el cabello quebradizo y las uñas frágiles, entre otros. Durante el embarazo, la salud y la belleza son cruciales para mantener el autoestima, entonces, en este sentido, el ácido fólico es una gran ayuda.

Fortalece los huesos

El ácido fólico es uno de los principales aliados cuando hablamos de prevención de problemas óseos. Por esta razón, es un aliado esencial para asegurar la correcta formación del bebé.

Beneficioso para el corazón

Este es otro gran beneficio del ácido fólico. Estudios recientes han demostrado que ayuda a reducir la homocisteína, un tipo de aminoácido que, en exceso, puede causar problemas como coágulos, por ejemplo. Esto es beneficioso tanto para la madre como para el bebé.

Esencial para el sistema nervioso

Uno de los elementos más cruciales para el desarrollo del sistema nervioso y, por ende, del cerebro del bebé, es precisamente el ácido fólico. Además, también es fundamental para el desarrollo cognitivo y emocional del bebé, lo que hace que la ingesta de esta vitamina sea aún más importante.

¿Qué es el metilfolato?

Ahora que ya comprendes mejor qué es el ácido fólico, podemos hablar finalmente sobre el metilfolato3. Muchas personas creen que son la misma cosa. Por eso, en primer lugar, es necesario aclarar la diferencia entre ambos.
El metilfolato es la forma del ácido fólico que se absorbe mejor en nuestro organismo; es decir, después de la ingesta de ácido fólico, tenemos que transformarlo en metilfolato para que pueda realizar sus funciones. Algunas personas tienen un polimorfismo en la enzima que realiza esta conversión y, por lo tanto, necesitan tomar un suplemento de metilfolato directamente. A pesar de que la mayoría de los suplementos vitamínicos contienen ácido fólico en su versión más común, cada vez es más fácil encontrar la versión de metilfolato, es decir, una versión sintética creada para que nuestro cuerpo absorba el 100% de sus nutrientes.

¿Cuál de los dos debería usar?

Después de entender exactamente qué es el ácido fólico y el metilfolato, y cuáles son sus diferencias, es común que te surjan dudas sobre cuál de los dos deberías utilizar y cuál es el mejor para tu caso. En general, dado que la mayoría de las personas desconocen si poseen este polimorfismo en la conversión del ácido fólico, la recomendación es optar directamente por el metilfolato, para satisfacer todas las necesidades de tu cuerpo durante el embarazo.
Algunos estudios demuestran que cerca del 10% de las mujeres no logran absorber adecuadamente el ácido fólico presente en los alimentos. En estos casos, por lo tanto, se indica el uso del metilfolato, ya que este es un producto que no requiere que nuestro cuerpo metabolice. Con esto en mente, muchas empresas, como Famivita, ofrecen metilfolato para ayudar a estas mujeres en la reposición de la vitamina.

Conclusión

Comprender exactamente qué son el ácido fólico y el metilfolato es también una manera de cuidar mejor tu embarazo. Como mencionamos anteriormente, muchas mujeres creen que estas son vitaminas que ayudan con la fertilidad o que son un estimulante hormonal. Cuando investigas y comprendes la función de cada vitamina para ayudar en tu gestación, no solo garantizas una mejor salud para ti y para el bebé, sino que también consigues más calma y tranquilidad para abordar estas cuestiones. Y en momentos en que las emociones están a flor de piel, esto es esencial.