¿Es malo el ventilador para los niños?

El verano es una época deliciosa para pasear, divertirse e incluso hacer algún programa al aire libre. Pero con tanto sudor, la hora de acostarse se convierte en un verdadero suplicio. Los que no tienen aire acondicionado terminan rindiéndose al viejo y buen ventilador. Pero, ¿qué hay que saber para ayudar a dormir a los más pequeños? ¿Es malo el ventilador para los niños?

¿Pueden dormir los niños con el ventilador encendido?

¡La respuesta es sí! Los padres pueden utilizar un ventilador en la habitación de los niños, siempre que esté a una distancia adecuada y dirigido hacia la pared o hacia arriba, para que el viento no apunte directo al niño. Tenemos una advertencia: los niños deben tener cuidado con los ventiladores, ya que pueden ser peligrosos para sus deditos. Mantenga los ventiladores siempre a una altura que los niños no puedan alcanzarlos.

En el caso de los ventiladores de techo, la opción es utilizar el modo ventilador de escape, ya que de esta forma se puede controlar el aire que sale despedido y se reparte uniformemente por la habitación.

Los padres deben tener cuidado de no sobreventilar al niño. Ellos no tienen el mismo control térmico que los adultos, y esto se convierte en un riesgo, ya que un cuerpo muy caliente en contacto con el viento frío del ventilador puede provocar un fuerte impacto térmico¹.

Limpieza del ventilador

Es importante destacar el mantenimiento e higiene del aparato. Al encenderse, las aspas que hacen circular el aire también esparcen partículas de polvo que se adhieren a ellas.

Es por esto que mantener el ventilador limpio en todo momento evitará la aparición de problemas respiratorios y alérgicos. Los ventiladores de techo deben limpiarse constantemente, a diferencia de los aparatos de aire acondicionado, que deben higienizarse cada 6 meses.

Los problemas respiratorios en niños también pueden aparecer al entrar en contacto con espacios muy cerrados, que acumulan suciedad y provocan graves afecciones alérgicas como rinitis, asma y sinusitis, responsables de grandes dolores y molestias².

Por lo tanto, el uso de un ventilador para niños está autorizado, siempre que se tomen todas las precauciones. En definitiva, los niños también pasan calor y se inquietan al dormir en los días calurosos. Mantén la habitación con buena circulación de aire, el ventilador encendido a una distancia que no cause demasiado impacto de viento sobre el niño y siempre a una altura segura para no lastimar los deditos.

Incluso con el ventilador, nunca olvides hidratar muy bien a tus hijos cuando haga calor³. Llevar ropa más fresca también puede ayudarles a dormir más tranquilos. Las estaciones cálidas y secas aumentan el número de casos de problemas respiratorios en los niños, así que tomar ciertas precauciones puede ayudar a prevenir algunos de estos problemas.

 

Un consejo para los padres es utilizar un humidificador. Este aparato mantendrá el aire húmedo y controlará la sequedad del ambiente, previniendo alergias, rinitis y asma, así como sequedad nasal y pequeñas hemorragias.

Para los que no tienen humidificador, el consejo es utilizar una toalla húmeda junto a la puerta de la habitación, en una silla o al lado de la cama del niño. La toalla húmeda ayudará a controlar la sequedad de la habitación y proporcionará una noche más tranquila.

¿Pueden los niños beber agua helada?

En verano, no hay nada mejor que beber agua fría para refrescarse. Pero en el caso de los más pequeños, existe el temor de que sea malo para ellos, ya que siempre hemos oído que el agua fría inflama la garganta. Pero, ¿es cierto? ¿pueden los niños beber agua fría?

La respuesta es sí, los niños también pueden y deben refrescarse pero no es el agua fría lo que los podría enfermar. Eso de que el agua fría resfría o infecta la garganta es un gran mito.

Es obvio que si tu hijo tiene un problema respiratorio, como gripe, resfriado o tos, hay que evitar el agua fría. Pero, en general, se puede ofrecer con normalidad. Si lo prefieres, la opción es mezclar un poco de agua helada y natural para equilibrar la temperatura.

Lo máximo que ocurrirá si tu hijo toma agua helada es que le duelan los dientes o, si tienen sinusitis, que se quejen del dolor en la frente, algo habitual en quienes padecen este problema.

Por cierto, cuando te operan para extirparte las amígdalas, ¿sabes qué tratamiento te recomiendan para que se curen? ¡Mucho helado y comida fría! Por lo tanto, ingerir alimentos o líquidos fríos no es algo que pueda causar dolor de garganta, sólo los agentes infecciosos pueden producir una infección.